sábado, 15 de junio de 2013

Olores de Universidad


Olores que no entienden, que obedecen, olores que hacen daño, olores que enloquecen.

¿Olores? Tu fortuna, tu esencia, el descontrol de tu sonrisa, el invite a tu demencia.

Olores que terminan, que te obligan a parar, olores que reclaman ‘no vuelvas a empezar’. Olores de escalera, olores de azahar, olores son momentos que no puedes olvidar. Olores sin sentido, olores consentidos, olores que no acaban, olores Nunca Más.

Olores para siempre, olores playa y sal, olores que se encienden, que intentan cabalgar.
Olores bajo el mar, olores busco paz, olores ¿y las cuentas que me quedan por pagar?
Olores en tu arte, olores de escritura, olores en palabras que camuflan comisuras.

Olores son los años, olores es el tiempo, escondido tras la estela que provoca el movimiento.

Olores inocentes, olores pervertidos, olores pies descalzos, olores atrevidos. Olores casi ciegos, olores irreales, olores que se acercan y que hieren cual zarzales.

Olores ¡Yo no puedo!, olores ¡Qué no debo!, olores no lo hagas… olores que me matas.

Olores color negro, olores de tristeza, olores como el humo que anochece en tu melena. Olores ya no hay prisa, olores no te vayas, olores de cenizas, olores que no callan. Olores de tu voz, olores de postal, olores muy insanos, olores de cristal.

Olores que hacen huella, olores que penetran, olores entre tierras que destierran las balanzas. Olores de mudanza, olores de estandarte, olores que tuvieron que presenciar el fatídico momento en el que te marchaste.

Olores como tú, olores como yo, como esta preciosa historia que dibuja el descontrol.

Gracias. 

Por estos 4 años, por lo que vendrá.




No hay comentarios:

Publicar un comentario