No puede hacer nada, es su condición, y ahora que
han llegado las bajas temperaturas, el hombre necesitará de sus defensas.
No habrá gloria cuando te hagan entrar desnuda por
el canal de la exprimidora.
Y se pregunta mientras asoma unos ojos
lacrimógenos; ¿quién me defiende a mí, ahora que estoy a punto de ser despojada
de todas mis virtudes?
-Pregunta estúpida,- le responde el sabio
melocotón. - Naciste con ese talante mientras el resto tuvimos que conformarnos
con un simple sabor exótico u otras vitaminas de menor calibre, fuiste la reina
del olvido durante el caluroso verano y ahora pides letanías de misericordia.
Inocente cítrico malcriado, afronta tus consecuencias y sal de nuestro frutero,
ocupas demasiado espacio.
No eres más que una esfera solitaria y despreciada
con piel de atardecer, a nadie gustarías si no fuese por esos componentes
curativos. No te engañes, mi querida naranja, tienes lo que te mereces.
Cómo sobrevivir a algo que parece ser lleva mucho
tiempo escrito, se pregunta mientras sus compañeras aceptan su condición y se
limitan a vivir mientras pueden. Cómo escapar de las garras del hombre y de la
perspectiva de un destino fatal al que parece que está condenada.
No se lo piensa dos veces.
Sale del frutero y se escribe a navaja sobre tu
torso-corteza que “quiero ser algo más
que una naranja”. Está cansada de pertenecer y ser etiquetada por un cúmulo
de adjetivos que le han impuesto.
Tan sólo quiere crecer y poder decidir, forjarse a
sí misma y crearse a su antojo. Levantarse y pensar que el mundo está hecho
para aquellos que sueñan que todo es posible, que la supervivencia no es un
sacrificio, sino la mejor de las oportunidades ante la adversidad.
No nos
queda más que sonreír ante el frío, ante la duda, ante la premisa de que
vivimos tiempos difíciles. Seamos sinceros, la simple idea de salir del frutero
de mierda en el que nos vemos atrapados, es lo más atractivo que podemos
permitirnos.
Al final la naranja se quedó en naranja, pero fue
feliz durante toda su vida, pues no se conformó con simplemente ser.